Pronto se cumplirán 2 años desde que Izal nos dijera adiós en aquel último concierto en el WiZink Center de Madrid. Después de 12 años de música, 5 discos e innumerables conciertos. Curiosamente, ese adiós nos lo dijeron muchos años antes comenzando su segundo disco con una Despedida. Despedida que tuvo que esperar 9 años para que entendiéramos todo lo que significaba.
Y pensándolo bien, ¿por qué esperar al final para escribir una despedida? ¿Por qué arriesgarnos a que nos pille desprevenidos, sin fuerzas, con dudas o resentimientos? Mucho mejor escribirla al inicio, cuando seguimos enamorados, eufóricos y viviendo en esos días tan rápidos, tan fáciles y tan intrépidos.
Porque queramos o no, cuando comenzamos algo por muy bonito que sea, comenzamos una cuenta atrás. Y aunque al comienzo nos sintamos superhéroes, llegará el día en que las balas no reboten o los malos sean más fuertes o volar no sea tan fácil o conozcan nuestros planes.
Por eso hoy, después de algo más de año y medio en Celonis, de una época de crecimiento, retos y momentos felices, quiero buscar esa pausa para valorar lo que tengo ahora. Hacer balance y prometerme seguir disfrutando hasta el final.
Quiero ir preparando mi fiesta de despedida en la que yo y todos aquellos que me acompañen estos años podamos recordar los buenos tiempos. Escribir esta “canción” por cada uno de aquellos días tan plácidos, ingrávidos, tan espléndidos, tan románticos… y que se marcharán.
La Increíble Historia Del Hombre Que Podía Volar Pero No Sabía Cómo
Si tengo que calificar esta historia con un adjetivo sería “increíble”. Increíble porque por mucho que empezara con la ilusión de una nueva etapa y la confianza de conocer personas a las que admiraba dentro, la experiencia me pedía prudencia y serenidad. Me pedía no ilusionarme demasiado e ir viviendo día a día, poco a poco. Después de algún batacazo y con la perspectiva de la edad, tenía muchas dudas de volver a vivir y encontrar ciertas cosas que ya tuve la suerte de vivir en mi vida laboral.
Empezaba con vértigo, tras una etapa complicada, volviendo al rol de manager y haciéndolo por primera vez desde fuera, sin conocer el producto y al equipo, pero gracias a lo que encontré los primeros días pronto pude borrar estas preocupaciones. Me encontré con compañeros que me hicieron sentir en casa desde el primer día, un buen onboarding, con tiempo y recursos necesarios para conocer la empresa, cultura, negocio y producto, y también con una fiesta en la primera semana en la empresa, como no podía ser de otra forma aquí 😂.
Después vino el primer proyecto junto a dos compañeros, para comenzar desde lo técnico, ganar conocimientos, irme adaptando a procesos y herramientas, y construir relaciones con el equipo y compañeros poco a poco. El proyecto fue bien y el equipo fue creciendo y fuimos capaces de ir construyendo nuestro espacio seguro, con confianza para ayudarnos, debatir y crecer. También fui conociendo otras personas de mi área, oficina y empresa geniales a las que admiro y de las que tengo la suerte de poder aprender.
La guinda del pastel de estos primeros meses vino con la organización del Gathering de Producto e Ingeniería de España en Junio. Preparamos un día para conocernos más y disfrutar y, por lo que parece, salió bastante bien. Mi carta de presentación para muchos compañeros que aún no había tenido oportunidad de conocer fue ejercer de anfitrión ese día para que pudieran conectar unos con otros y disfrutar del día. Y para ser sincero, no se me ocurre mejor carta de presentación que ponerme al servicio de los demás para que las personas puedan construir relaciones y disfrutar su trabajo.
Claro que hubo días de preocupaciones, horas perdidas luchando contra la ansiedad, nervios, taquicardias, sudores y crujidos, pero fue genial tener personas a mi alrededor que me decían que estuviera tranquilo y disfrutara del camino. Fue genial poder coger así los mandos, salir de la órbita oscura y volar alto al hiperespacio. Entre planetas de mares helados, veranos de soles blancos y, por supuesto, con un poco de Bowie para disfrutar de estos primeros meses en Celonis.
Copacabana
El periodo de prueba terminó y cosas que día a día me frustraba por no conseguir, llegaron tras unos meses, en lo que para mí fue un parpadeo, y se convirtieron en más de lo que hubiera imaginado. Y es que solemos sobreestimar lo que podemos hacer a corto plazo y subestimar lo que podemos conseguir a largo.
Llegué a mi Copacabana. Tras estos primeros meses de inseguridades y ajetreo, se fue el miedo y llegó la calma. Logré la serenidad y claridad para seguir trabajando con lo que había aprendido, creciendo y consiguiendo retos que venían por delante.
Vinieron nuevos proyectos, mi primer Celosphere, la oportunidad de hacer crecer a una persona de mi equipo hacia manager, nuevas incorporaciones, primeros team buildings, un segundo Gathering de Producto e Ingeniería y mucho más. Momentos de pensar despacio, querer deprisa y caminar con la frente alta. Y algunos recuerdos de momentos que fueron perfectos, Copacabana y claqué.
Hogar
Tras estos primeros meses de viaje, de novedades y tantas cosas por aprender, hoy me siento en casa y creo que es lo más bonito y difícil que se puede llegar a decir de una empresa. Y no es que me esté poniendo cómodo o empiece a ver techos y paredes a los que me tengo que adaptar. Sé que seguirán llegando retos, logros, aprendizajes y celebraciones. Sé que habrá momentos que me saquen de mi zona de confort, me frustren y me hagan dudar. Pero tengo un buen lugar al que volver.
Entré a este mundo laboral, como imagino que muchos otros, amando la tecnología y, ahora entiendo, algo eclipsado por ella. Entré pensando en desarrollar retos imposibles, dominar campos y tecnologías complejas, lanzar productos que cambian el mundo. Y después de más de 12 años aquí y sintiéndome afortunado por la carrera profesional que he tenido y los proyectos en los que he participado, debo reconocer que la tecnología fue lo de menos… Si pienso bien puedo acordarme de proyectos especiales y retos que me sentí satisfecho por conseguir. Pero lo que forma parte de mis recuerdos y ha hecho este viaje tan especial han sido las personas.
Por eso lo que más orgullo y felicidad me puede dar es que haya personas que se acuerden de mí y de cómo las hice sentir, y es a lo que quiero dedicar mis mayores energías de aquí en adelante. Que haya personas que me recuerden porque les ayudé a crecer, a salir de un momento malo, a lanzar una idea en la que creían, a avanzar en su carrera… Quiero centrarme en comprender, empatizar, colaborar, ayudar y hacer hogar allí donde esté.
Y de momento no quiero pensar en los días que me quedan dentro de esta casa. Hoy me quedo con los pies más pegados a este suelo, que es mío y a la vez del resto, de la gente que hace de esta empresa mi hogar.
El baile
Después de este algo más de año y medio, mirando atrás, aún no termino de creerme lo que he encontrado aquí y lo que he conseguido hasta ahora. Tampoco puedo imaginarme todo lo que me queda por delante. Y creo que es la primera vez que puedo decir esto de una empresa llevando el tiempo que llevo.
Soy consciente de que a veces me pudo el drama y me dejé llevar por el miedo a que nadie me dijera adiós al irme, cerrando etapas antes de tiempo mientras aún me sentía querido y valioso. Pero hoy me siento más fuerte y maduro para aguantar ese miedo y seguir aportando y contribuyendo aquí.
Quiero que esta canción de despedida se transforme en mucho más cuando llegue el momento de irse. Quiero no olvidarme de lo importante y concentrar mis energías allí. Vivir más en el presente y disfrutarlo al máximo. Evitar los miedos y la ansiedad de lo que podría pasar y nunca llega. Y cuando llegue el momento, poder revivir buenos tiempos, días perfectos de luces y cálidos colores a los que volver una y otra vez. Que cuando llegue el fin de los finales, esta casa esté llena de amigos, recuerdos y canciones que nos digan tanto. Y que mientras todo se derrumbe, a nosotros nos vean bailando. Seguir bailando, y disfrutando, hasta que todo acabe.
*Durante el artículo he utilizado letras originales de IZAL como homenaje a uno de mis grupos favoritos de siempre