Hace unas semanas terminé un proceso de transformación que me ha llevado más de 4 años. Lo hacía asistiendo a mi primer evento presencial grande, la Tarugo 22. Fue el último esfuerzo, comprar una entrada meses antes para asistir solo a un evento sin saber si iba a conocer a alguien. Y terminó con una gran recompensa personal, participando en una gran celebración, sintiéndome una pequeña parte de una comunidad muy bonita, disfrutando mucho del evento y recordando el proceso que me llevó hasta allí y de lo vivido en el camino.
Para entender esta transformación es necesario saber el origen. Soy introvertido y desde que tengo recuerdo he sido muy inseguro, con miedo a equivocarme, al rechazo, a lo que los demás puedan pensar o decir de mí. Esto me llevó durante mucho tiempo a vivir en modo T-Rex, quedándome muy quieto para que nadie pudiera verme. Pero a la vez sufría porque quería hacer cosas, estar con gente, participar, ser aceptado. Quería ser visto.